Lunaciones: ¿de qué se tratan estas fases?
Las lunaciones hacen referencia a las fases lunares por las que pasa nuestro satélite natural en todo su ciclo. Desde la antigüedad se han asignado actividades únicas para cada lunación según las características de cada fase, relacionadas con la agricultura, la astrología entre otras. En astrología se tiene la creencia de que cada fase promueve el desarrollo de emociones características, afectándonos de manera diferente a su paso, así que saber en qué consiste exactamente las lunaciones, puede ser de gran ayuda para poder entender los cambios que experimentamos. ¿Quieres saber más sobre este interesante tema?, te invitamos a leer lo que sigue.
Luna nueva y cuarto creciente
La luna nueva es la fase inicial, en este momento ésta se sitúa entre nuestro planeta Tierra y el astro Sol, y es por eso que vemos la cara más sombría de este satélite o en otras palabras, simplemente no la vemos. En esta lunación, la atracción de la Luna y el Sol son mayores, y es así como sus influencias se sienten en su mayor esplendor, son momentos de calma y de reflexión, de hacer un balance de lo que hemos hecho y de lo que necesitamos para llegar hasta donde queremos estar. Es un periodo ideal para hacer conciencia sobre un objetivo en especial, pero sin tomar decisiones precipitadas, esta fase está diseñada más que todo para analizar nuestra situación y ser conscientes de nuestra realidad.
En el cuarto creciente la Luna se aleja del Sol, y esta sí es una época idónea para actuar y tomar cartas en el asunto, ya se ha reflexionado en cuarto creciente, ahora es momento de hacer esos pensamientos realidad, de arriesgarnos por conseguir lo que queremos. En esta época también se despiertan en nosotros, todas las emociones y sentimientos relacionados con la feminidad, que poseemos todos con mayor o menor intensidad.
Luna llena y cuarto menguante
En esta etapa la luna muestra toda su belleza para que podamos apreciarla a plenitud, este es el punto máximo de la distancia que puede haber entre la Luna y el Sol ya que los dos se encuentran enfrente a 180 grados respectivamente. Esta es una fase en la que todos los sentimientos salen a flor de piel, es por eso que tal vez nos vemos más susceptibles a los comentarios o a las acciones de lo demás. Pero también son momentos de éxtasis y de alegría, ideales para realizar nuestros planes más alocados, sin el temor de que algo salga mal. Si quieres arriesgarte a hacer algo significativo ¡no lo dudes más!, esta es la época perfecta.
Y luego tenemos el cuarto menguante que es la última fase del ciclo lunar, en esta etapa la Luna se sitúa a 90° con respecto al sol, y es cuando más cercana a la Tierra está, en esta lunación es momento de recoger el fruto de nuestros esfuerzos. O en su defecto, de asumir nuestras consecuencias por los actos infundados y necios, también es un buen momento para finalizar etapas, o para dar fin a compromisos desgastantes que nos quitan la calma.
